Un año después del incendio de Cortes (Valencia)

El incendio de Cortes de Pallás, ocurrido en el verano de 2012, afectó a 28.643 hectáreas, de las que 5.041 eran de arbolado y 23.602 de matorral. El incendio afectó a los términos municipales de Cortes de Pallás, Yátova, Macastre, Alborache, Turis, Real, Montroy, Llombai, Catadau, Carlet, Tous y Dos Aguas.
Al año siguiente, el verano de 2013, tuve ocasión de visitar parte de las zonas quemadas, entre Macastré y Dos Aguas. Al tiempo que contemplaba la desolación de tanta vegetación quemada, que años anteriores había visto verde, también pude comprobar como muchas especies empezaban a recuperarse.

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Buena parte de las especies se estaban recuperando por rebrote vegetativo, de cepa o de raíz. Se observaban rebrotes de las siguientes plantas: retama (Retama sphaerocarpa), brezo (Erica multiflora), bocha blanca (Dorycnium pentaphyllum), coscoja (Quercus coccifera), lentisco (Pistacia lentiscus), mirto (Myrtus communis), palmito (Chamaerops humilis), enebro (Juniperus oxycedrus), hinojo de perro (Bupleurum fruticescens), espino negro (Rhamnus lycioides), madroño (Arbutus unedo), adefa (Nerium oleander), aladierno (Rhamnus alaternus), candilera (Phlomis lychnitis), fresnos de flor (Fraxinus ornus), olivo (Olea europaea) y algarrobo (Ceratonia siliqua). En las siguientes fotografías se ven algunas de ellas.

Madroño

Enebro

         

Palmito

Aladierno

Mirto

Mata de coscoja con toda la parte aérea quemada, pero
con la base llena de rebrotes

Detalle de los rebrotes de coscoja

Otras especies se están recuperando tras el fuego mediante la regeneración por semillas, entre ellas el propio pino carrasco, la principal especie arbórea de la zona. Los pinitos a veces aparecen en grupos apelotonados con numerosas plantitas, lo que podría indicar que proceden de una misma piña enterrada. También hay regenerado de tojo (Ules parviflorus), romero (Rosmarinus officinalis), estepa blanca (Cistus albidus). En las siguientes fotografías podemos ver algunas de estas especies.

Romero

Brezo

Estepa blanca

Pinos en grupo y tojos

Pero si se dirige la mirada al paisaje la imagen es bastante desoladora. Sin duda deberán pasar bastantes años hasta que la vegetación se recupere. En la siguiente fotografía se aprecia el predominio de la tierra y la roca y la ausencia de vegetación, devorada por el fuego del año anterior. Aún así quedan pinos dispersos que serán la fuente de semillas para la reinstalación del antiguo bosque, ayudado por las semillas y el rebrote de muchas otras especies.

Parece que buena parte de los pinos carrascos que se han salvado del fuego estaban dispersos entre vegetación de menos estatura, bien entre regenerado de pino de poca edad o entre matorrales. En estas zonas el fuego pudo alcanzar menos altura y parte de la copa de los pinos no resulto quemada, al tiempo que la corteza de la parte inferior del tron estos árboles ha protegido los tejidos vivos internos del calor.

La mitad superior de la copa de este pino carrasco se ha
salvado del fuego. Ayudado de la gruesa corteza que da la
edad el pino sobrevivirá y podrá ofrecer semillas para
la recuperación del bosque

Pino carrasco con la mitad de la copa sin quemar. Escaparía
del fuego al situarse por encima de la vegetación general
o en una situación topográfica favorable

Entre la vegetación silvestre quemada quedan cultivos de olivo y de otras especies que se han salvado en gran parte debido
a la menor densidad del arbolado

Los fuegos recurrentes hacen que montañas enteras presenten cada vez peores suelos y que la recuperación de la vegetación sea cada vez más difícil.

Vistas de cerca estas colinas presentan abundante roca del sustrato que aflora a la superficie así como muchas piedras sueltas. Las condiciones del suelo son pésimas para la vegetación, lo que hace que las especies como el propio pino carrasco sean las únicas que podrán reocupar sitios tan emprecidos. 

Un pino carrasco que nació entre las rocas calizas

Entre el pedregal algunas plantas son capaces

de mantenerse tras ciclos repetidos de

incendios gracias a un vigoroso rebrote

vegetativo como estas matas de palmito.

La coscoja también se mantiene en el pedregal
gracias a su profuso rebrote aún en laderas de
elevada pendiente.

Este abundante regenerado de pino sucumbió al incendio sin la oportunidad de haber dejado pinos grandes que sirvieran de fuente de semillas para la recuperación del pinar. Solamente el pino más viejo situado en la parte izquierda de la fotografía podrá proveer de semillas para la regeneración.

En esta ladera empinada y pedregosa el matorral se ha empezado a recuperar, pero no se observan pinos carrascos cercanos que puedan ofrecer semillas para la recuperación del pinar. Los pinos de la parte superior eran todos muy jóvenes.

Algunos enlaces con informaciones del incendio:

http://www.elmundo.es/elmundo/2012/07/03/valencia/1341328761.html

https://voluntariosdelena.files.wordpress.com/2012/07/mapa-del-incendio-comunidad-valenciana-01_07_2012.jpg

http://blogs.comunitatvalenciana.com/senderismo/2012/07/16/senderos-afectados-por-los-incendios-de-cortes-de-pallas-y-andilla/mapa-incendio-cortes-de-pallas/

http://foro.tiempo.com/reportaje-incendios-cortes-de-pallas-y-andilla-t138199.0.html

http://rectas.blogspot.com.es/2012/06/incendio-dos-aguas-cortes-de-pallas.html